Archivos diarios: 5 de May de 2013
El Rincón De Elbace Restrepo
ÁNGELES DE SAL Y DE DULCE
No es fácil convivir con ninguna enfermedad, pero la FQ exige encontrar el médico adecuado que conozca de la enfermedad, tener los recursos para pagarlo o lograr que la EPS remita al paciente, poder adquirir los medicamentos y garantizar que el enfermo tenga Pulmozyme, Tobraicina, Zbec, Aquadeck o sus vitaminas A, D, K, calcio, solución salina hipertónica, enzymas digestivas, Ensure, una alimentación rica en carbohidratos, proteínas, vitaminas, minerales y suficientes calorías para lograr el peso adecuado. Los costos pueden estar entre millón quinientos y ocho millones de pesos mensuales, dependiendo de si hay presencia de seudomona u otra bacteria en el pulmón.
Como verán, se superan aspectos en los que las demás personas normalmente vuelcan toda su atención, como dónde pasarán las próximas vacaciones o cuáles son los zapatos de moda.
Los FQ son ángeles salados que, a pesar de toser toda la noche, muchas veces con fiebre y siempre con mucho desaliento, van persiguiendo sus sueños armados de una gran sonrisa y de una entereza que nadie sabe de dónde la sacan.
El trasplante de órganos es, para los pacientes FQ, la única posibilidad de llegar a ser adultos. Por eso suplican al mundo que entienda que un cuerpo no es útil si lo entierran o lo creman.
Ser donante es una decisión voluntaria de cada uno de nosotros o de nuestros familiares en un momento de dolor, pero cuando se da el sí tan esperado, ese ser fallecido recibe sus alas de ángel dulce y muchas personas sienten alivio en su corazón, porque saben que algunas vidas se pueden salvar y que los ángeles salados podrán realizar sus sueños gracias a sus propios esfuerzos, a los avances de la ciencia y a la sensibilidad de quienes donan sus órganos para que otros vivan.
«Alimentar cada día la esperanza de que llegará la cura y tu hijo aún estará contigo para recibirla, es una batalla entre la razón y el corazón. Por Paulina, por Konstance Valentine, por Juan, por todos los que siguen en lista de espera, quizá por tu hijo, que un día también pudiera estar en ella, y por Felipe, que ya recibió sus pulmones, ¡hazte donante…».